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viernes, 26 de febrero de 2010


¡QUIERO SER SENCILLO!...


¡Quiero ser más sencillo,
todo simplicidad...
Deseo ser como los niños:
pura felicidad!...

Deseo ser sencillo,
como quien no tiene edad;
sin buscar aplausos, ni brillo;
trabajar sirviendo, sin tanta complejidad...

Quiero amar con intensidad,
no fingir, no actuar.
Busco ser sincero
e intento ser cordial...

¡Quiero ser más modesto
y no buscar aparentar...
No llamar la atención,
sólo colaborar..!

¡No quiero ser admirado
y sí, en todo, admirar...
No procurar ser alabado
y sí, a todos, valorar!..

¡Quiero ser tan sencillo,
como un bebé con su mamá;
busco estar tan alegre,
como quien se está por casar;
deseo ser tan puro que,
en todo, sepa amar.
Y vivir más seguro,
"orando sin cesar"..!

Pbro. José Luis Carvajal

miércoles, 24 de febrero de 2010




TU AMOR, ME HACE LLORAR...
 
Señor, tu Amor me hace llorar,
como un dibujo de un hijito
a sus padres, lagrimear.
Yo no soy mejor que los demás,
y mi llanto no es un premio
por santidad...
 
Y perdonen... porque sé:
que reír, hace reír
y llorar, hace llorar...
Pero es que su Amor es un sentir...
un explotar... un quemar...
 
...Y no es un regalo de riqueza,
aunque, sí, muy personal.
Es algo de su Divina Voluntad,
dirigido a mi pobreza.
¡Y su Amor... me hace llorar!
 
Pbro. José Luis Carvajal

lunes, 22 de febrero de 2010



Con Vos, como Vos...


Con Vos, como Vos, Señor,
cual vagido de un infante,
mi corazón "te habla":
"-Maestro, ¿dónde vives?"
Aunque es más sabroso, el escucharte...
"-Vengan y lo verán".
Fuimos, y se nos fue la tarde (Jn 1, 35-39)...

¡Renunciar, amarte, seguirte e imitarte!..
¿No es un poco inalcanzable?..
Pero Tú nos llevas, de la mano,
como tierna madre, como dulce padre...


¡Te saboreo, Señor, te gusto!..
En silencio, y al caer la tarde...
Porque, cuando el cansancio llega,
tu consuelo es, aún, más grande...

Con Vos, Señor, como Vos,
y como María,
yo también quiero ser:
"pescador de hombres" (Lc 5, 10);
humilde y fuerte;
lo "despreciable" (1 Co 1, 28)...
Adorador y profeta.
¡Y elegir, siempre, el lugar de mayor pobreza!


Pbro. José Luis Carvajal


22 de Febrero: LA CÁTEDRA DE SAN PEDRO, APÓSTOL. FIESTA


La palabra “Cátedra”, literalmente, es la silla fija (o sede) del Sumo Pontífice y de los Obispos.
Esta silla está, en cada Diócesis, en la Iglesia Madre o principal (de aquí el nombre de Catedral).
Pero lo importante de hoy es que la Iglesia Católica (la única fundada por Jesucristo, al decir: “Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia”: Mt 16, 18) quiere celebrar este papel de Jefe y Pastor de la Comunidad, que Jesús confió a S. Pedro y a sus sucesores.

El sucesor de Pedro es, hoy, Benedicto XVI. Y los sucesores de los otros Apóstoles, son los Obispos de todo el mundo (si están en comunión con el Papa).

Justamente, lo llamamos “Papa” o “Santo Padre”, porque es el “Papá” o “Patriarca” espiritual de todos: “Tú eres Pedro... Yo te daré las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo” (Mt 16, 16.19). "El poder espiritual se manifiesta, sobre todo, en el poder de perdonar los pecados” (Biblia para la iniciación cristiana, Conf. Episcop. Española).

Escribe S. Agustín: “Es después de haber negado al Señor que llegó a ser el primero junto a él. Volviéndose más fiel al llorar la fe que había traicionado, recibió una gracia todavía más grande que la que había perdido. Cristo le confió su rebaño para que lo condujera como el buen pastor y él, que había sido débil, se convirtió en el sostén de todos. Él que, preguntado sobre su fe, había sucumbido, tuvo que establecer sólidamente a los demás en el fundamento inquebrantable de la fe. Es por eso que es llamado la piedra fundamental de la piedad de las Iglesias”.

“Pedro... es constituido Cabeza de todos los pastores de la Iglesia” (San León Magno).

El Señor Jesús nos envía y nos pide ser uno (en torno a Pedro) por la fe y por el amor.

El Papa hace las veces de Cristo (“el dulce Cristo en la tierra”: Sta. Catalina de Siena). Por eso, le debemos obediencia y amor, y rezar siempre por sus intenciones.

Por último, la Fiesta de hoy, nos ofrece una oportunidad más para adherir a las enseñanzas del Santo Padre (como hicieron todos los santos, de todos los tiempos). Y proponernos conocerlas más...

“Jesús, Tú que has rogado para que todos los que creemos en Ti, nos mantengamos en la unidad, permite que nuestro amor por la Cátedra de Pedro sea motivo de reconciliación y unidad, entre los cristianos, que aún permanecemos separados” (Esther Pizzariello de Leóz)

Con mucho afecto, p. José Luis Carvajal (Argentina)

Se ruega su difusión, citando esta fuente. ¡Muchísimas gracias!

sábado, 20 de febrero de 2010


Primer Domingo de Cuaresma, Ciclo “C” (Lc 4, 1-13: Cristo tentado por Satanás, en el desierto).


El Señor siempre nos llama a confiar en Él (y a poner todo nuestro humilde esfuerzo) para lograr superar las tentaciones de toda clase: incitaciones al egoísmo, a la agresividad, al pesimismo, etc.

Siempre sentiremos la provocación al pecado: deseos de poder, de materialismo, de cosas deshonestas. Pero Cristo Jesús nos enseña a vencerlas y superarlas con la oración, el ayuno (o privaciones voluntarias) y con la limosna (o caridad).

Sin dudas, todos los días enfrentamos un “combate espiritual” contra el mal; por eso, será determinante nuestra oración (la fuerza de la oración), para poder mantenernos firmes, y en gracia de Dios, y en el Camino verdadero. Es por esto, que todos los días, pedimos: “no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal”.

Por medio de la tentación, el enemigo busca engañarnos. Por eso, la 1ª Carta de San Pedro nos recuerda: “Sean sobrios y esté siempre alerta (o vigilantes) porque su enemigo, el demonio, ronda como un león rugiente, buscando a quién devorar. Resístanlo firmes en la fe...” (5, 8-9).

Jesucristo es nuestro Dios y el Señor de nuestras vidas, y el que le da verdadero sentido a nuestro existir. Pero Satanás intentará siempre seducirnos y engañarnos para que, en nuestro corazón, reemplacemos al verdadero Dios por falsos ídolos, que intentarán vaciarnos...

Vivimos en un mundo lleno de instigaciones hacia el mal, roguemos, entonces, a Dios, para tener paciencia, firmeza en la fe y un amor fiel. Que las tentaciones sean oportunidad para decir “sí” a Jesús y dar testimonio de Él, viviendo “llenos del Espíritu Santo”...

Además, Jesús, en el Evangelio, nos enseña, también, a vencer las provocaciones, con la Palabra de Dios.

Si vivimos en Él; si vivimos en Cristo y para Cristo (y para los hermanos), venceremos al maligno, y las incitaciones a pecar nos servirán para ser más humildes, y no creernos, soberbiamente, perfectos.

Que María nos ayude, antes las tentaciones, a no enorgullecernos, ni acobardarnos; sino a orar, amar y confiar... Que así sea, con la gracia de Dios... Con mucho cariño, p. José Luis Carvajal

viernes, 19 de febrero de 2010

teresianas.org

¡QUÉ POCO NOS PARECEMOS!

¡Qué poco nos parecemos,
Jesús, mi Centro...
Qué loco mi pensamiento
y qué sensatos tus sentimientos!...
¡Somos tan distintos, discípulo y Maestro!...

¡Qué poco me asemejo,
aunque cada día te "veo"...
Qué pena dejar de lado,
tanto regalo, tanto misterio!...

¡Somos tan distintos, pero Tú me llevas dentro!...
¡Cuán amplio es tu Amor y tu contento...
Y qué poco mi cariño y mis intentos!...
¡Cuán grande mi oposición y mi disenso.
Lo admito, porque, ante Ti, no hay secretos!...

Pero, aunque poco nos parecemos,
yo soy tuyo y Vos, sos nuestro...
Lo mío es poco, eso es cierto;
y, aunque lo tuyo es eterno, es gratuito,
es sin límite de tiempo...
¡Lo poco mío, Tú lo haces perfecto
y mi grano de mostaza será grande y eterno!...

Pbro. José Luis Carvajal

miércoles, 17 de febrero de 2010

MÁS MOMENTOS DE SILENCIO

Necesitamos mayor tiempo
de oración y de silencio,
"ver al que ve"... y poder escuchar a Cristo,
y poder oír al Verbo...

Precisamos esos momentos
de contemplación y sosiego,
para que no nos dominen
ni obsesiones, ni sentimientos...

"La Palabra se hizo carne" (Jn 1)
y fue acogida sólo en el silencio...
"Vino a los suyos,
y los suyos no lo recibieron"...

¡Estarían muy ocupados, los poderosos,
en sus negocios y "éxitos"!...
Sólo los pastores y los más modestos,
la percibieron, la adoraron, y le creyeron...

¡Danos, Señor, el don del silencio,
que nos hace más sinceros,
que no permite que escapemos,
y capacita para el diálogo fraterno!...

¡Danos un corazón orante, oblativo...
y seremos seres nuevos:
"en la acción, contemplativos",
y al mundo, reconstruiremos;
anunciando y vivenciando
tu pequeño rebaño y tu sencillo Reino..!

Pbro. José Luis Carvajal

LA CUARESMA

Comenzamos este tiempo de Cuaresma, recordando los 40 días de Jesucristo en el desierto, orando y ayunando, hasta que lleguemos al Domingo de Pascua. Y, justamente, la Pascua de Resurrección de Jesús le da sentido a toda nuestra vida y a nuestra muerte.

Nuestra Madre, la Iglesia, nos enseña que es bueno que, en este período cuaresmal, intensifiquemos la oración, el ayuno y la práctica de la misericordia. Como decía S. Pedro Crisólogo: “la oración llama, el ayuno intercede y la misericordia recibe. Oración, misericordia y ayuno constituyen una sola y única cosa, y se vitalizan recíprocamente”, y nos posibilitarán abrirnos a la comunión con los otros...

Estamos llamados a un esfuerzo continuo de conversión. Por eso, también será clave nuestra frecuencia en los Sacramentos de la Eucaristía y de la Confesión o Reconciliación, reconociéndonos pecadores, egoístas, débiles y frágiles; y que, todo el tiempo, necesitamos la gracia y la conversión...

Si logramos practicar todo esto: oración, ayuno, misericordia, Eucaristía y Confesión, se nos garantiza una alegría muy profunda, un gozo inigualable, una paz interior única. Porque: “al apartarse del pecado y acercarse a Dios, el hombre no puede dejar de experimentar una profunda alegría” (Pablo VI). Sí, verdaderamente, al imitar a Cristo e identificarnos con el Señor, se irá acrecentando el gozo en nuestras almas; porque nuestro espíritu está sediento de Dios (Cfr. Sal 41, 2). “Podríamos decir que el hombre vive del amor que sólo Dios, que lo ha creado a su imagen y semejanza, puede comunicarle... Convertirse a Cristo, creer en el Evangelio, significa precisamente esto: salir de la ilusión de la autosuficiencia para descubrir y aceptar la propia indigencia, indigencia de los demás y de Dios, exigencia de su perdón y de su amistad.

Se entiende, entonces, cómo la fe no es un hecho natural, cómodo, obvio: hace falta humildad para aceptar la necesidad de Otro que me libere de lo “mío”, para darme gratuitamente lo “suyo”. Esto sucede, especialmente, en los Sacramentos de la Penitencia y de la Eucaristía” (Benedicto XVI, Mensaje para la Cuaresma 2010).  Presbítero José Luis Carvajal Ibelli (Buenos Aires, Argentina)

CUARESMA

-RECUERDA LOS 40 DÍAS DE JESÚS EN EL DESIERTO (orando y ayunando).
-LO MÁS IMPORTANTE, EN ESTE TIEMPO: cambiar el corazón (el ayuno y la abstinencia, son signos de conversión).
- El miércoles de ceniza, no es día de precepto, pero es importante… Por eso, tratamos de participar de la Eucaristía y hacemos ayuno (de 18 a 59 años, comiendo la mitad, por lo menos, que de costumbre) y abstinencia (de 14 en adelante).
- EL AYUNO es signo de “ayunar” de nuestros pecados; práctica solidaria con los hambrientos;  preferencia  del Pan de la Palabra y freno a nuestro consumismo y egoísmo.
- LA ABSTINENCIA es signo de renunciar a algo para colaborar en el pan de los pobres y nos permite estar “en forma”, por dentro…

"Cuaresma es una invitación a cambiar aquello que tenemos que cambiar en la búsqueda de ser mejores y mas felices, una invitación a construir en vez de destruir y a mirar y volver hacia formas de vida más justas, más solidarias, más humanas… Es una llamada para buscar diligentemente nuevas formas de ser y hacer Iglesia siendo mejores y más auténticos discípulos del Crucificado y Resucitado.

El tiempo litúrgico de la Cuaresma - como nuestra propia existencia - lo recorremos con la mirada puesta en la Pascua de Resurrección y en la Pascua definitiva en Dios. Pascua de vida abundante que se opone a toda forma de discriminación y de envilecimiento del ser humano, de su dignidad; a toda forma de atropello y violencia; a toda forma de mentira, maldad y muerte; a toda forma de corrupción y división; a toda forma de marginación y opresión. Porque la Pascua, como punto de llegada, culmen y superación de la Cuaresma, es absoluta novedad de vida, de la vida abundante que Dios nos ofrece y a la que Dios nos invita en este tiempo y en todo tiempo".
                                     (Mario J. Paredes, presidente de la Asociación Católica de Líderes Latinos)






lunes, 15 de febrero de 2010


¡QUE MI VIDA SEA..!

¡Que mi vida sea... una página en blanco,
donde haya sueños y no sólo trabajos;
gratuidades, y no sólo "mercados";
ilusiones, sin importar los "fracasos";
y asombros, llenos de "descansos"..!


¡Que me vida sea...amar sin condiciones;
gustar, saborear a Dios
y obedecerle, sin pretensiones..!
¡Que mi vida sea... un discipulado,
no creyéndome maestro, solo caminando al lado,
de quien no tiene canciones,
por vivir asustado..!


¡Que mi vida sea... llamado,
a vivir en comunión de corazones hermanos
y, aunque el propio corazón esté llagado,
igual se haga caricia y bendición,
para el hermano postrado,
herido o en pecado..!


Presbítero José Luis Carvajal

sábado, 13 de febrero de 2010



¡GRACIAS POR TU CENA!



¡Gracias por tu Cena, por tu Alimento!..
Por darnos lo eterno, en el tiempo...
Tu Cuerpo, tu Amor,

todo lo que llevas dentro...


¡Gracias por tu Cena!..
Es distinta, es diversa
a nuestras cenas...
Porque es tu Sangre
la que marca la diferencia,
porque tu entrega, nos renueva...


¡Gracias por tu Cena!..
Es bellísima esta realidad:
mi alma y cuerpo, purificarán,
el Cuerpo y la Sangre de tu Divinidad...


Jesús, tu Cena, nos hace Familia,
nos forma Asamblea,
del aislamiento, nos libera...
Y nos enseña tu coherencia...


Con tu Cena, nos alientas,
nos recreas, nos haces
escuela de respuestas
y nos tomas muy en cuenta...


¡Gracias por tu Cena!..
Me llena de esperanza,
que siempre estés tan cerca
y que estén, tus manos,
permanentemente abiertas...


¡Gracias por tu Cena!..
Mi alma se serena;
tu Cuerpo y Sangre,
irradian su belleza;
mi corazón, mansamente, te contempla;
sus problemas, te conversa...
Porque, a todos escuchas,
a todos contestas...
¡Y, de todos, te interesas..!


Presbítero José Luis Carvajal

viernes, 12 de febrero de 2010


"...Yo les digo: amen a sus enemigos,
hagan el bien a los que los aborrecen.
Así serán hijos de su Padre que está
en el cielo, que hace salir el sol
sobre buenos y malos..." (Mt 5, 44 y ss.)

ERES NUESTRO PADRE Y MADRE...

Tú eres nuestro Padre, eres Misterio.
Eres lo bueno, lo bello, lo perfecto...
Eres Aquello que, sólo, no puedo:
amar a los enemigos, a los que no nos han creído,
hacer el bien a los que han mentido,
perdonar a los que, de tu Verdad, se han ido...

Mi Padre, mi Señor, Fuente de todo bien,
por quien es posible creer y poder.
Tú me creaste, me sacaste del no ser.
También eres mi Madre, en cuyo Seno,
pude madurar y crecer...

Mi Padre, que estás en el Cielo,
que estás en cada hermano, en el pobre, en el enfermo...
Mi Padre o, más bien, "Padre nuestro":
porque somos tus hijos, porque somos tu Pueblo.
Porque, si no te confesáramos como Padre,
nuestra vida sería una soledad y un infierno...

¡Nuestro Padre, que nos libera
de separarnos y del encierro!..
¡Nuestro Padre, de quienes venimos
y a quien, en la muerte, volvemos!
Por eso, nos encaminas
hacia lo eterno, hacia lo más real,
"lo único necesario": ¡Tu Seno Materno y Paterno!

Presbítero José Luis Carvajal

martes, 9 de febrero de 2010

FEBRERO 11: La fiesta de Nuestra Señora de Lourdes se celebra hoy, día de su primera aparición. Muchos milagros de sanación están documentados.
El 11 de febrero de 1858, Bernardita, de catorce años, vio a una Señora vestida de blanco y con el Rosario. Estas visiones se repitieron 18 veces. “-¿Quien eres?”.
"-Yo soy la Inmaculada Concepción".

El Papa Benedicto XVI, oró así, en Lourdes: “Bernadette contempla esa sonrisa de María. Ésa fue la primera respuesta que la Hermosa Señora dio a la joven. En la sonrisa que nos dirige, se refleja que nunca abandona a quienes están enfermos. Esta sonrisa, reflejo verdadero de la ternura de Dios, es fuente de esperanza inquebrantable. El sufrimiento padecido rompe los equilibrios mejor asentados de una vida. Es un combate que el hombre no puede afrontar por sí solo. Es necesaria una presencia amorosa, íntima. Cristo y su Santísima Madre, la Inmaculada son, más que nadie, capaces de entendernos y apreciar la dureza de la lucha contra el mal y el sufrimiento.

(Orción) Santa María, tú que te apareciste, a la joven Bernadette, ‘tú eres la verdadera fuente de esperanza'. Como peregrinos confiados, llegados de todos los lugares, venimos una vez más a sacar de tu Inmaculado Corazón: fe y consuelo, gozo y amor, seguridad y paz. Muéstrate como una Madre para todos, oh María. Danos a Cristo, esperanza del mundo. Amén" (Benedicto XVI).

lunes, 8 de febrero de 2010

"¡Tú me has seducido, Señor, y yo me dejé seducir!...
Había en mi corazón como
un fuego abrazador..."
(Jeremías 20, 7.9)


¡ENAMORADOS DE CRISTO!

¡Enamorarnos de Cristo!...
¡Enamorarse, sí, estar como ido...
como quien no piensa en otra cosa,
porque, de amor, su corazón, está herido!...

¡Enamorados, enloquecidos...
como jóvenes, recién casados:
al amor unidos, pendientes;
entusiasmados, plenos y,
al mismo tiempo, serenos...
Y, en sus brazos, adormecidos!...

¡Señor, me lleno de tu amor y de tu vino...
Todo lo tuyo, hecho uno, con lo mío...
Sin tantas preguntas, porque...
tu Mirada, tu Corazón, son Divinos!...

¡Enamorado de Tí, Jesús
y rejuvenecido:
renuncio y olvido, porque
Tú me haces feliz...
Porque me siento atraído
y, contigo, mucho más que la renuncia,
es lo positivo!...

¿Qué importa, qué día muera?...
¿Qué interesa, si algo
o alguien no he tenido?...
¿Qué vale todo, si no estás conmigo?...
¡No necesito nada, si me amas
y si, dentro tuyo,
me mantienes vivo!...

Presbítero José Luis Carvajal

domingo, 7 de febrero de 2010




¡CUÁNTAS VECES...!



¡Cuántas veces, Jesús, te dejo de lado

y me encierro y no pienso al hermano...

Cuántas veces, sin poder explicarlo,

de Ti me olvido y parezco un lejano!...



¡Cuántas veces me enfrío y me aparto

y cuántas me canso temprano...

Porque no busco, porque no amo,

porque me pongo primero... y no abajo!...



¡Cuántas veces confieso lo mismo

y no avanzo y no soy distinto...

Cuántas veces, por esto mismo,

me fatigo y desanimo, querido Amigo!...



¡Cuántas veces empecé de nuevo

pero, Vos, Señor, no lo tienes en cuenta,

porque, aunque pobre y ciego,

tengo la mirada atenta...

Para renovar mis anhelos,

para renovar mis entregas!...



Pbro. José Luis Carvajal

jueves, 4 de febrero de 2010



¡QUE MI VIDA SEA..!

¡Que mi vida sea... una página en blanco,
donde haya sueños y no sólo trabajos;
gratuidades, y no sólo "mercados";
ilusiones, sin importar los "fracasos";
y asombros, llenos de "descansos"..!

¡Que me vida sea...amar sin condiciones;
gustar, saborear a Dios
y obedecerle, sin pretensiones..!

¡Que mi vida sea... un discipulado,
no creyéndome maestro, solo caminando al lado,
de quien no tiene canciones,
por vivir asustado..!

¡Que mi vida sea... llamado,
a vivir en comunión de corazones hermanos
y, aunque el propio corazón esté llagado,
igual se haga caricia y bendición,
para el hermano postrado,
herido o en pecado..!

Presbítero José Luis Carvajal

miércoles, 3 de febrero de 2010

"Yo les aseguro: si no cambian y no se hacen como niños,
no entrarán en el Reino de los Cielos.
Así pues, quien se haga
pequeño como este niño, ese es el mayor en
el Reino de los Cielos"
(Mt, 18, 3-4).





COMO UN NIÑO...


Como un niño frágil, te busco, Señor,
con mi llanto, con mi apuro...
y con mi canto.

¡Quiero ser niño, siempre, pero no "aniñado!..
"Estoy como un niño en brazos de su madre" (Sal 130)
Como quien confía y sólo no puede...
"¡Espera en el Señor, ahora y siempre!" (Sal 130)
Espera en Aquel, "que todo lo conoce
y todo lo puede"...

Lloro, río o no comprendo...
Como los niños que ignoran o son ignorados...
Así, me compadezco y comparto
con los más olvidados...

¡Como a niños explotados, sucios, marginados,
así, muchos dejan de lado
a millones de seres humanos!..
Y, encima, se creen maduros, y se piensan sabios...

¡Hace falta hacerse niño,
conocerse, pedir ayuda, esforzarse
y no creerse superado!...
Sencillos, no sabiendo todo, preguntando...
¡Y no tener tanto miedo, de salir humillados!..

Niños... necesitados... y no ser mal pensados.
¡Cuántas maravillas, si nos "hacemos como niños"
y no vivimos enfrentados!..

¡Sí, como niños!.. ¡Y un día el Reino de los Cielos,
y ya, desde ahora...un mundo nuevo!..

P. José Luis Carvajal

martes, 2 de febrero de 2010


EDUCAR ES...DAR

Educar es darse...
 y entregar:
                      saber, para adquirir;
                     valores, para asimilar
                   y verdades, para asumir...



Educar es exponerse...
                  Y, para trascender, hay que:
                       aceptar y corregir,
                       escuchar y asumir...

Educar es vivir:
             con fidelidad, para no desviarse;
           con misericordia, para no frustrar;
           con realidad, para no desanimarse
      y con espiritualidad, para no desesperar...

Educar es comprometerse,
porque, en la diversidad,
hay que saber quererse...
corriendo el riesgo de formar
y de "meterse"...
Para educar hay que concientizarse,
porque las personas lo merecen...
No alcanzan los contenidos,
hay que involucrarse;
por eso, no es tan sencillo,
ni educar, ni educarse...
¡Depende del amor con que se hace
y depende del amor con que se aprende!..



                                       Presbítero José Luis Carvajal

lunes, 1 de febrero de 2010





Yo experimento tu perdón cotidiano,
aquello que me permite estar a tu lado...
Tu Corazón, lleno de amor, se siente "obligado"
a darme su perdón, a regalarlo,
porque siempre me encuentras... necesitado.

Yo saboreo el saberme perdonado,
el sentirme limpio, por saberme amado.
Pues tus Palabras me han evocado:
todas tus ternuras, todos tus cuidados,
el cumplimiento de lo que me habías anunciado...

Yo agradezco, emocionado,
tu perdón cotidiano, tu perdón cercano,
que me hace más puro y liviano,
en el mismo camino, en que me había embarrado,
en el mismo pozo, en que estaba encerrado...

Yo busco tu perdón cotidiano,
aquello mismo que siempre he buscado...
¡Pues de nada sirven los trabajos humanos,
si no estás, tú Señor soñado,
si Tú no estás, vivo, en nuestros actos,
si no estás Tú, misericordiosamente "obsesionado"!..

P. José L. Carvajal