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viernes, 24 de diciembre de 2010



DICIEMBRE 25- NAVIDAD

El Señor toma la iniciativa de amor…Navidad es la fiesta de la cercanía, la ternura y la fidelidad de Dios para con nosotros, su Pueblo.
El Cardenal Bergoglio, nos decía: “…Dios se enamoró de nuestra pequeñez y se hizo ternura; ternura para toda fragilidad, para todo sufrimiento, para toda angustia, para toda búsqueda...Dios hecho ternura, Dios acariciando nuestra miseria, Dios enamorado de nuestra pequeñez..Cabe la pregunta:¿Te dejás acariciar por esta ternura de un Dios que te quiere? O ¿sos arisco y no te dejás buscar por ese Dios? Y más allá todavía: ¿Vos te animás también a hacerte ternura para toda situación difícil, para todo problema humano, para quien tenés cerca, o preferís la solución burocrática, ejecutiva, fría, eficientista, no evangelizadora?..Esta ternura nos tiene que acompañar a lo largo de la vida, en los momentos de alegría, de tristeza, de cruz, de trabajo…No nos queda otra cosa que abrir nuestro corazón y decirle: Señor, si Tú lo hiciste así, ayúdanos; danos la gracia de la ternura en las penosas situaciones de la vida, dame la gracia de la projimidad ante toda necesidad humana; dama la gracia de la mansedumbre, ante todo conflicto” (Homilía 24/12/2004. Boletín eclesiástico).
Toda la vida de Jesús, desde su Encarnación y Nacimiento, fue un constante abajamiento, un “vaciarse de sí mismo”, de ponerse al servicio de los demás…”Él, que era de condición divina, no consideró esta igualdad con Dios como algo que debía guardar celosamente: al contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de servidor y haciéndose semejante a los hombres,.. presentándose con aspecto humano…” (Flp 2, 6-7).
Jesús, todo el tiempo, nos enseñó a ser como niños, a buscar la sencillez de corazón, a no buscar sobresalir, a buscar las cosas esenciales, a no caer en la vulgaridad…Un modelo de humildad, nos lo dan los pastores de rebaños, del tiempo de Cristo, quienes “fueron los primeros en escuchar el anuncio del Nacimiento del Salvador” (Juan Pablo II).
Él que fue excluido, naciendo entre animales, nos predica la inclusión; Él, que fue odiado y perseguido, desde Herodes hasta la Cruz, nos enseña el perdón; Él que nació, vivió y murió pobre, nos inculca el desprendimiento y la pobreza de espíritu. Y Él, que es el Rey de toda la Creación, nos predica la servicialidad, humillándose hasta lavar los pies a sus discípulos…
Que su aparente fragilidad, al hacerse un Niño, nos transmita Misericordia, paz, reconciliación…
BELÉN
María es silencio, escucha,
contemplación...
Jesús es Dios, hombre pobre,
predicación...
José es trabajo, servicio,
hecho oración...

María es mirada atenta,
austeridad, realización...
Jesús es fragilidad, delicia,
encarnación...
José es respuesta al misterio,
y a la interpelación...

María es abandono, confianza,
en el Hombre-Dios...
Jesús es Palabra hecha Carne
y su Carne nos dio...
José es grandeza, despojo,
disposición...

María es alegría, magnificat,
el misterio creyó...
Jesús es perdón y amor de Dios...
José es "el último", el callado...
y gozó su condición...

María es bella humildad, a Dios cautivó...
Jesús es uno de nosotros,
pero no pecó...
José es el padre, el acompañante,
por vocación...

María es entrega, sin duda, sin confusión...
Jesús es Belén, amor en Cruz,
es donación...
José es sufrir en fe y en silencio
al no encontrar explicación...

María es la importancia de lo oculto,
Madre en toda ocasión...
Jesús es Hijo siempre
y el ser hombre asumió...
José es lo verdadero, lo fiel,
lo interior...

¡Y los tres son, para con Dios,
actitud de vacío y franqueza, aceptación...
En su plan, cooperación...
Y, de su Misterio, el rostro y la visión!...
 P. José Luis Carvajal

3 comentarios:

  1. SANTA Y FELIZ NAVIDAD, le deseo de todo corazón, desde Valencia, Molntserrat

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  2. De todo corazón quiero felicitarte por la Navidad. Que el Niño Dios te bendiga y te colme de alegría y paz.

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