¡GRACIAS, SEÑOR!
(escrita en mi
enfermedad)
¡Gracias, Señor,
porque, a través y a pesar,
de algunos rechazos y
menosprecios humanos,
yo te encuentro, y a Ti
me aferro!
¡Y gracias por dejarme
reconocer
que, alguna vez, yo
también caí en ellos!...
¡Gracias, porque me
enseñaste:
a no mendigar
ni los regalos, ni los
consuelos!
¡Y enséñame a perdonar,
de mis hermanos,
sus olvidos... y a
comprender sus miedos!..
¡Gracias, porque Tú
estabas "en lo
secreto" (Mt 6, 6),
y me suavizabas por
dentro...
Me aliviabas en lo
interior, en "mi templo"!..
¡Gracias, mi Dios,
por tu compasión, por tu
"tiempo"!..
¡Gracias, porque me
siento de tu Pueblo,
y porque me envías a
consolar
con tu mismo consuelo (Cfr Is 40, 1; 2 Co 1)!..
En la enfermedad, te
digo:
¡Gracias!... Porque
experimento:
tu respeto concreto...
Y me enseñas, me
purificas, me renuevas...
¡Y saboreo, en el
misterio,
tu Cruz, tu llamado, tu
predilección... y tu beso!..
Presbítero José Luis
Carvajal
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Te agradezco tu comentario respetuoso...